Recorrer este país es todo un deleite, porque en cada una de sus entidades, encontramos muchos lugares maravillosos donde podemos tener aventuras reconfortantes, las mejores experiencias y probar delicias gastronómicas que nos dejan satisfechos y con el paladar contento. Todos los sitios que visitamos en nuestro México, nos dejan encantados, pues muchos de esos estados resguardan bellas costumbres y tradiciones ancestrales, que son la mezcla perfecta para sentirnos como en un sueño, además de contar con espacios creados por la naturaleza, donde la aventura siempre está a la orden del día.
Tlaxcala es el estado más pequeño del territorio nacional, una localidad que a pesar del tamaño, cuenta con grandes atractivos turísticos que puedes disfrutar en un recorrido de un día o si piensas pasar un fin de semana muy relajante y en esta nota, vamos a explorar cinco bellezas naturales, que puedes conocer en uno de tus paseos, si te encuentras cerca del Pueblo Mágico de Huamantla, con actividades aptas para que todos los miembros de tu familia, puedan sentirse a gusto y tener tardes encantadoras, donde el contacto con la naturaleza y su lado salvaje, será el elemento sobresaliente.
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1. Laguna de Totolcingo
Justo en sus límites con Puebla, se localiza la hermosa Laguna de Totolcingo, a la que puedes llegar muy fácilmente desde Huamantla, si conduces una distancia aproximada de 30 kilómetros. Se le conoce también con el nombre de Tequesquital, debido a las sales y minerales que contienen sus aguas, una maravilla natural que puedes conocer este fin de semana, en un viaje corto que te tomará un aproximado de una hora en tu automóvil particular, si sales desde Huamantla, el plan de escape perfecto para conocer con tu pareja, ir con tu familia y tener un picnic, hacer senderismo y disfrutar de la tarde en un ambiente muy relajado y tranquilo, rodeado de los mejores paisajes.
2. Cascada de Atlihuetzía
El nombre Atlihuetzía, proviene del náhuatl y significa “lugar donde cae el agua” y es una hermosa cascada que tiene un poco más de 30 metros de altura, la cual puedes conocer a tan sólo una hora con treinta minutos, partiendo desde Huamantla. Esta caída de agua está rodeada por bastante vegetación y sus aguas, que provienen del cauce del río Zahuapan, desembocan en una laguna de aguas frescas, donde puedes pasar una tarde sumergido y nadando para refrescarte. Muy cerca de este lugar, está una peña, donde podrás tener las vistas panorámicas más espectaculares y observar algunas pinturas rupestres de Amaxac, el sitio perfecto para desconectarte de la tecnología y sentirte parte de la naturaleza a través de un viaje sensorial entre sus espacios.
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3. Santuario de las luciérnagas
Entre los meses de junio, julio y agosto, inicia la temporada de luciérnagas, el momento perfecto para salir a recorrer los senderos más espectaculares, en un paseo nocturno a través de los bosques y santuarios, que se dedican a la conservación de estas especies. Existen una amplia variedad de lugares donde los viajeros pueden disfrutar de una experiencia entre las luces de estos insectos y en Nanacamilpa, la aventura nocturna con las luciérnagas, es una actividad imperdible. Pero eso no es todo, pues antes de caer la noche, puedes aprovechar que estás de paso y aventurarte a recorrer las diferentes haciendas pulqueras que se encuentran en Nanacamilpa y conocer más de cerca, todo sobre el proceso de producción artesanal, de esta bebida de dioses.
4. Parque Nacional La Malinche
Este parque se localiza entre Tlaxcala y el estado de Puebla, a unos cuantos minutos en tu automóvil particular, si viajas desde Huamantla. Es considerado como un “museo vivo de flora y fauna”, gracias a la enorme diversidad de plantas y especies animales que vienen hasta aquí, para vivir en armonía con los elementos que rodean a este bello parque que abarca un poco más de 47 mil hectáreas de terreno. En su interior, habitan un poco más de 900 especies, entre ellas, algunas endémicas de la zona. Aquí podrás sentir el contacto directo con la madre tierra y sus elementos, el sitio perfecto para hacer senderismo, traer tu bicicleta y recorrer los caminos más inhóspitos o relajarte y descansar en una de las cabañas en renta y degustar de los deliciosos antojitos mexicanos.
5. Desierto de Cuapiaxtla
Muy pocas personas saben que Tlaxcala tiene un desierto y aunque no es el más conocido de México, es un punto natural encantador, que se localiza a sólo 20 kilómetros de Huamantla, el plan perfecto para recorrer nuevos espacios, poco frecuentados por los turistas y que encantará a los amantes de los climas y paisajes cálidos. Esta zona desértica subsiste en una cuenca y es uno de los lugares más seguros para poder viajar y recorrer un ecosistema poco común en el centro del país. Si deseas conocer este espacio, debes venir preparado con suficiente agua, ropa cómoda y algún refrigerio, para aguantar el calor que se siente desde el momento que llegas, una experiencia fascinante que te dejará maravillado.