Entre los 125 municipios del Estado de México se forma un crisol de culturas, paisajes y tradiciones, pero, ¿qué decir de su gastronomía y bebidas? Lo más conocido son las bebidas espirituosas, o sea, el pulque , que se consume por las zonas colindantes con Hidalgo, como es San Martín de las Pirámides y San Juan Teotihuacan. Bien, ya estamos hablando de Pueblos Mágicos, y sí, te platicaremos de otros dos que se especializan desde hace alrededor de 100 años en la elaboración de licores de hierbas.
Se trata de Metepec y El Oro; el primero está en el Valle de Toluca, y el segundo, al noroeste de la capital mexiquense. Son dos municipios con el nombramiento de Pueblos Mágicos y cuyas bebidas emblemáticas no son tan comunes como los licores o cremas frutales que se encuentran más fácilmente en otras regiones del país; y esto se debe seguramente a que quienes preparan dicho elíxires herbales guardan celosamente la receta.
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‘La Garañona’ de Metepec
Este Pueblo Mágico es reconocido por su feria de San Isidro, sus artesanías en barro -principalmente el Árbol de la Vida- y los ‘canarios’ (tamales que en lugar de manteca llevan mantequilla), pero también lo es por una bebida que tiene la fama de ser afrodisíaca, de ahí el nombre de “Garañona”. La encuentras únicamente en el Bar 2 de Abril, donde se sirve a los sedientos o que llevan un mal de amor, desde 1932.
Entre los más de 14 componentes de la “Garañona” y a los que se le atribuyen sus propiedades digestivas y medicinales, está la hierbabuena, el cedrón, el gordolobo, el ajenjo y la miel para darle el toque de dulzura; el resto de hierbas, seguirá en el anonimato. Ya sea que la tomes sola o preparada con agua mineral y hielos para rebajar un poco su nivel de alcohol.
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El Oro, tiene su ‘Chiva’
Igual que la “Garañona”, a la “Chiva” la distingue el color verde brillante por sus ingredientes herbales. La preparación de este licor se remonta a unos cien años atrás, y la receta ha pasado de generación en generación, pero no sale de este municipio de historia minera. El porcentaje de alcohol de la “Chiva” está entre los 22 y 30 grados, y dicen que “¡pega como chiva!”, así que hay que tomarla con moderación; también puedes agregar un poco a una taza de café, y te aseguramos que te encantará.
En el Oro, que por su cercanía con Michoacán, también tiene entre sus artesanías la elaboración de esferas, puedes conseguir ate de membrillo casero y la “Chiva” en los negocios familiares. Este preparado de 21 ingredientes tiene entre su base hierbabuena, manzanilla, menta, toronjil, prodigiosa, anís y ajenjo.