Para ti, que vives en la zona metropolitana del país pero estás en busca de destinos cercanos y que a la vez te permitan olvidarte del ruido y tráfico de la ciudad, te tenemos una grandiosa propuesta en un Pueblo Mágico que está a un par de horas de la Ciudad de México en un viaje en carretera.
¿Qué lo hace especial? Que se disfruta mucho en la actual temporada de lluvias ya que entre sus atractivos naturales hay dos enormes cascadas que estos días lucen espectaculares por el incremento de agua; pero eso no es todo ya que si te consideras un viajero foodie, encontrarás los quesos artesanales más exquisitos.
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Aculco, el Pueblo Mágico con cascadas y el Museo del Queso
Ubicado a dos horas de la Ciudad de México y a hora y media de Toluca, la capital del Estado de México, Aculco es uno de los 12 Pueblos Mágicos de la entidad mexiquense; aunque está muy cerca de la zona metropolitana, en Aculco "se respira" un ambiente de provincia muy tranquilo gracias a la hospitalidad de su gente.
Desde el 2012 es parte del programa de la Secretaría de Turismo federal (Sectur) y también tiene la declaratoria por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad al ser parte del Camino Real de Tierra Adentro. Además de recorrer sus calles empedradas y admirar los enormes muros de cantera que son parte de su interesante arquitectura, en el centro de Aculco debes visitar el Museo y Mesón del Queso, ubicado en la calle Morelos No. 22.
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Es común que en las calles de Aculco encuentres negocios con venta de queso artesanal en varias presentaciones e ingredientes que sorprenderán a tu paladar; si quieres hacer un recorrido por el Museo y Mesón del Queso, está abierto sábados y domingos de 11 de la mañana a 5 de la tarde.
Cascadas y atractivos de Aculco
Aculco está a 40 minutos de San Juan del Río y a una hora de la ciudad de Querétaro; destaca por sus peñas y el trabajo en cantera, pero si te adentras a este Pueblo Mágico, te recomendamos una visita a las cascadas Tixhiñu y La Concepción, a la Peña y la Presa de Ñadó, el balneario municipal, sus lavaderos públicos, el Jardín Principal, el Puente Colorado, el Santuario del Señor de Nenthé, así como la Parroquia y el Exconvento de San Jerónimo.