Si estás pensando salir de vacaciones e ir a un destino único con una vista más que espectacular, déjanos decirte que tenemos el lugar perfecto para que disfrutes de un viaje inolvidable. Se trata de un desierto blanco de aproximadamente 800 hectáreas donde el paisaje es más que asombroso debido a sus dunas de arena blanca.
Una visita obligada para todos los amantes de los paisajes únicos y extraordinarios está en Cuatro Ciénegas Coahuila, todos quienes los visitan por primera vez quedan atónitos ante lo que ven sus ojos. Este lugar es tan especial que se dice solo hay otros tres lugares parecidos en todo el mundo: en Nuevo México, Texas y Túnez.
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¿Cómo se formó el desierto blanco de yeso en México?
Hace millones de años, Coahuila formaba parte del Mar de Tetis, un océano de la era Mesozoica. Al irse este mar, lagunas que quedaron se evaporaron con el paso del tiempo. Sin embargo, el yeso que dejó este proceso permaneció y dio paso a la formación de una de las dunas menos comunes del mundo, las blancas. La arena de este lugar está compuesta de sulfato de calcio y silicio, sustancias que le da un aspecto brillante, suave y terso. Este lugar va a cumplir 30 años como Área de Protección de Flora y Fauna Cuatro Ciénegas, por lo que si quieres visitarlo tendrás que ir acompañado de un experto o guía.
¿Qué hay en el desierto blanco de México?
Si visitas este lugar, puedes caminar a lo largo de sus senderos, en tu camino podrás observar animales como conejos, lagartijas, correcaminos, ratones, canguros y hasta escorpiones. Sin embargo, podrás observar cuatro tipos de dunas:
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1. Domo: montículos de arena que se elevan hasta casi los 9 metros de altura.
2. Lunadas o barjnes: son dunas en forma de media luna creadas por el viento
3. Transversas: son una combinación de las dunas con forma de luna y colinas de arena
4. Parabólicas: la vegetación luce entre sus entrañas, se ven montículos y entre ellos destacan las raíces de las plantas.