Oaxaca esconde muchos tesoros. Este estado goza de tradiciones increíbles y de misterios que, hasta la fecha, continúan explorando los expertos, y ahora parece que se encontró la puerta de entrada al Inframundo, misma que los zapotecas consideraban increíble y maravillosa, por lo que es un lugar único.
El proyecto Lyobaa, mismo que se realizó entre el Instituto Nacional de Historia y Antropología (INAH), la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y la Asociación para la Investigación y Exploración Arqueológica, ARX Project, A.C., confirmó la existencia de un sistema de cuevas y pasadizos debajo de la Iglesia de la Zona Arqueológica.
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En un informe explicaron que el proyecto empleó tres distintas metodologías geofísicas para escanear el sitio, entre ellas: Georradar (GPR), Tomografía de resistividad eléctrica (ERT) y Tomografía de ruido sísmico, y que los resultados y las imágenes generadas a partir de estos tres métodos se combinaron para proporcionar un modelo 3D preciso de lo que se encuentra debajo del suelo.
La conclusión fue que confirmaron la existencia de posibles cámaras y túneles subterráneos debajo del Grupo de la Iglesia de la Zona Arqueológica, en el mismo lugar donde los documentos coloniales y la tradición local afirman que se encuentre la entrada al inframundo de Lyobaa.
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La entrada al Inframundo debajo de una iglesia en México
De acuerdo con los historiadores y los registros, en 1674, el padre dominico Francisco de Burgoa describió la exploración de las ruinas de Mitla y de sus cuartos subterráneos por un grupo de misioneros españoles, con un templo subterráneo que constaría de cuatro cámaras interconectadas, que contendrían las tumbas de los sumos sacerdotes y de los reyes de Teozapotlán.
Para verificar la tradición local de que el altar mayor de la iglesia católica oculta la entrada al laberinto subterráneo de Burgoa, los patios y grupos de estructuras alrededor de la iglesia fueron investigados con métodos geofísicos. Se instalaron varios conjuntos de electrodos y geófonos alrededor de la iglesia para crear una imagen tridimensional de lo que puede haber debajo del suelo.
Ambos métodos confirmaron la existencia de una posible cavidad de grandes dimensiones ubicada justo debajo del altar mayor y que parecería extenderse en dirección noroeste y oeste. Esta cavidad parecería además estar conectada con otra anomalía geofísica significativa ubicada inmediatamente al norte de la iglesia, confirmó ARX Project.
Ahora, los expertos esperan que este septiembre puedan obtener permiso de la comunidad local y el Comité de la Iglesia de San Pablo Apóstol de Mitla para realizar más exploraciones geofísicas en el área de la iglesia de San Pablo, donde se detectaron anomalías geofísicas significativas en la primera etapa.