México es un crisol de culturas; en un solo país en el que conviven -y convergen- un sinfín de tradiciones y costumbres que dan identidad a cada uno de los 32 estados, pero por si eso fuera poco, se conservan pueblos originarios que enriquecen aún más un viaje por la República Mexicana.
Sus playas en las costas del Pacífico, el Mar Caribe y el Golfo de California con aguas turquesa y la arena que refleja los destellos del Sol, ya sea en tonos dorados o blanca, son un paraíso para los visitantes nacionales y extranjeros; sus Pueblos Mágicos que suman ya 177 en este 2024 o las zonas arqueológicas que encierran una historia del México antiguo, pero ¿cuándo es la mejor época para hacer un viaje a México desde el extranjero?
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Los meses más baratos para viajar a México
Si estás en el extranjero y te has sentido atraído por la belleza y riqueza natural, histórica y gastronómica de México, la cantidad de dinero que gastes en un viaje a este país mucho dependerá de la temporada en que lo visites; primero hay que descartar los meses de vacaciones, tanto de Semana Santa, verano y fin de año.
La razón por la que se les llama "temporada alta" a los meses de abril, julio, agosto y diciembre es porque hay mayor demanda de servicios turísticos y los costos suben, para que una vez que pase ese tiempo, vuelven a la "normalidad" y son más económicos, lo cual incluye desde los viajes en avión, hospedaje, entrada a balnearios y hasta alimentos.
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Así que para planificar tu viaje a México, los mejores meses son febrero, marzo, octubre y noviembre, pues son antes y después de las temporadas vacacionales, pero es importante que consideres las condiciones del clima de tales meses, pues octubre y noviembre suelen ser de lluvias y huracanes que podrían estropear tu paseo si estás en alguna playa.
Recomendaciones para unas vacaciones baratas en México
Otro de los atractivos de México para el turismo internacional es que es considerado como un destino económico a comparación de otros países, pues ofrece opciones para que durante tu estancia en el país sea muy barata; todo dependerá de qué tan exigente y el tipo de experiencias que busques.
En los distintos litorales, hay playas públicas con acceso gratuito, para ahorrar en alimentos y conocer la verdadera gastronomía local, nada como los mercados de los pueblos o municipios; respecto al hospedaje, hay hostales con tarifas muy accesibles y si tu visita es a la capital del país, es fácil y barato trasladarte en el sistema de transporte público.