La historia mexicana es uno de los tesoros más destacables del país, esencialmente aquella que se centra en las antiguas civilizaciones gracias a todos los conocimientos y raíces que nos heredaron. Y, bajo esa línea, te hablaremos de un rincón sagrado de Hidalgo que se considera como el lugar donde habitaron los primeros habitantes de México, el cual debes visitar en tus próximos días libres.
A lo largo del territorio mexicano podemos encontrar numerosas zonas arqueológicas que son huella de la existencia de las culturas que llegaron a existir, impresionando a todo aquel que las visita debido a la perfección y complejidad de las construcciones, abriendo interrogantes de cómo pudieron realizarse si en ese tiempo no había grandes tecnologías de las cuales se pudieran ayudar los pobladores.
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Sin embargo, en esta ocasión, te hablaremos de una cueva en la que se encontraron entierros humanos que datan hace más de miles de años antes de Cristo, dejando entrever que podrían tratarse de los primeros colonizadores del continente, según lo mencionan expertos encargados de estudiarlos.
Cueva del Tecolote, el sitio donde habitaron los primeros humanos
El sitio en cuestión se trata de la Cueva del Tecolote que se considera como uno de los lugares donde vivieron los primeros humanos que habitaron el continente americano. Y es que, según el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), en 1960, la prehistoriadora norteamericana Cynthia Irwin-Williams realizó una excavación en la Cueva del Tecolote, ubicada en los acantilados al oriente de la zona arqueológica de Huapalcalco, donde se encontraron restos óseos de personas que tenían características físicas a la de los pobladores de hace miles de años.
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Según los estudios realizados, los entierros humanos corresponden al horizonte Cenolítico Superior de 9 000 a 7 000 años antes del presente, considerándose así como los más antiguos del Valle de Tulancingo en Hidalgo. Cabe mencionar que no sólo había restos humanos, sino también esqueletos de, al menos, seis perros.
No obstante, las características físicas de los restos fue uno de los aspectos que más llamó la atención de los investigadores; “Los huesos largos de las extremidades superiores son más anchos que los de la población prehispánica indígena común”, documenta el INAH. Ante esto, el antropólogo físico Neftalí Monterroso dijo a esta misma institución que, “los rasgos corporales en huesos largos de la extremidad inferior y cráneo que alejan a los esqueletos de la Cueva del Tecolote de la forma corporal del [indígena] prehispánico común y lo acercan a los primeros colonizadores del continente”.
Así, tras estas expediciones e investigaciones, la Cueva del Tecolote, que se encuentra a 50 minutos de Pachuca, Hidalgo, ganó una gran popularidad e importancia dentro de la historia de México. Si bien los restos hallados los puedes ver en el Museo Nacional de Antropología, también tienes oportunidad de visitar la cueva.