Desde mayo inició en México la temporada de lluvias y ciclones tropicales, pero hasta el actual mes de junio estos fenómenos hidrometeorológicos pronosticados para el litoral del Atlántico han tenido mayor actividad, generando fuertes y torrenciales lluvias, inundaciones, trombas marinas y en algunas ocasiones descargas eléctricas.
Si en estos días tienes un viaje en avión, seguramente te preguntarás qué ocurre cuando, por las descargas eléctricas, un rayo impacta la aeronave. Esta duda es normal pues hemos visto películas con episodios trágicos, sin embargo, lo primero que hay que dejar claro es que los aviones actuales ya cumplen con elevados estándares de seguridad para evitar accidentes fortuitos.
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¿Qué pasa si un rayo golpea un avión?
Hoy día, los aviones son de los medios de transporte para viajeros más seguros que existen, y en el caso de volar mientras hay lluvia, descargas eléctricas y rayos, la Cámara Nacional de Aerotransportes (CANAERO) explica que los impactos de los rayos no causan daño alguno a las aeronaves pues están diseñadas para ello.
Como pasajero, sin duda podrás admirar desde las ventanillas cómo alumbra la descarga eléctrica y el descenso de los rayos, más no sentirás ningún impacto porque al tocar el avión, la electricidad se mueve en la parte exterior ya que el fuselaje actúa como conductor y la corriente se desplazará hasta la zona de la cola del avión para "salir".
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En el impacto y recorrido de la electricidad, la cabina permanece segura, sin embargo, lo más prudente es que los pasajeros permanezcan en sus asientos y con el cinturón de seguridad colocado, que son parte de las indicaciones que da el personal de la tripulación de la cabina de pasajeros o los pilotos.
Así que si estás por abordar tu avión y está lloviendo o durante el vuelo atraviesan una tormenta eléctrica, puedes estar tranquilo de que el diseño y material de la aeronave te resguardará ante los impactos de los rayos eléctricos. En caso de turbulencia, hay que asegurar el equipaje en los compartimentos superiores y cerrar bien las puertas, además mantener la mesa de servicio sujeta al asiento de enfrente.