El mezcal del Estado de México ha dado un paso histórico al recibir la Denominación de Origen (DO) en 2025, un reconocimiento que fortalece a esta bebida espirituosa, y coloca al Edomex en el mapa de las regiones mezcaleras más importantes del país.
El Estado de México, con sus 15 municipios del sur dedicados a la producción de mezcal, obtiene así un respaldo oficial del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) que garantiza la autenticidad y el valor cultural de esta bebida tradicional.
Te podría interesar
La obtención de la DO garantiza que más de 5 mil 500 hectáreas de agave mezcalero en la región están protegidas bajo el distintivo “Mezcal Hecho en México”.
La ruta del mezcal
Los 15 municipios que ahora forman parte de la región mezcalera con Denominación de Origen son:
Almoloya de Alquisiras, Amatepec, Coatepec Harinas, Ixtapan de la Sal, Luvianos, Malinalco, Ocuilan, Sultepec, Tejupilco, Tenancingo, Tlatlaya, Tonatico, Villa Guerrero, Zacualpan y Zumpahuacán.
Estos municipios, situados principalmente en la zona sur del Estado de México, han cultivado el agave y producido mezcal con un alto valor cultural y artesanal durante generaciones. La región no solo es conocida por su producción de mezcal, sino también por el legado que han dejado los maestros mezcaleros.
La producción del mezcal mexiquense sigue un proceso artesanal que combina tradición y naturaleza. Los pasos para su elaboración son los siguientes:
Cosecha del agave: El primer paso consiste en la recolección del agave maduro, que se cultiva bajo condiciones controladas y respetuosas con el medio ambiente.
Cocimiento: El agave se somete a un proceso de cocción en hornos de tierra, lo que le otorga un sabor característico.
Molienda: Tras la cocción, el agave es triturado para extraer los jugos azucarados que serán fermentados.
Fermentación: El jugo extraído se coloca en tinas de madera y se deja fermentar de manera natural durante varios días.
Destilación: Finalmente, el mosto fermentado se destila en alambiques de cobre para separar los compuestos y obtener el licor final.
Envasado: El mezcal es envasado en botellas de vidrio para su distribución.
Con la Denominación de Origen, el mezcal mexiquense tiene un futuro prometedor, ya que abre nuevas oportunidades comerciales para los productores, tanto a nivel nacional como internacional.
Además, este reconocimiento también se convierte en un motor económico para la región sur del Estado de México, lo que fortalece el empleo local y la economía en estas áreas rurales.
El programa Plantaciones Sustentables, impulsado por el Gobierno del Estado de México, ha sido clave en este proceso. Gracias a él, se han consolidado más de 900 hectáreas productivas de agave, con una inversión de más de 5 mil 6 millones de pesos.
De igual manera, se han implementado programas de certificación y asesoría técnica, lo que permite que los productores accedan directamente a mercados formales y eliminen la dependencia de intermediarios.
Con esta declaratoria, publicada en el Diario Oficial de la Federación, el mezcal mexiquense obtiene protección y visibilidad a nivel nacional e internacional.