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El increíble destino que vio nacer a Grigor Dimitrov, el tenista que enamoró a Eiza González

Conoce el destino en Europa donde nació este prolífico deportista que confirmó su relación en el Festival de Cannes

El increíble destino que vio nacer a Grigor Dimitrov, el tenista que enamoró a Eiza GonzálezCréditos: Unsplash: Neven Myst/ Eiza Gonzalez
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Grigor Dimitrov y Eiza González son los nombres del momento, y no es para menos. Para quienes crecimos viendo a Eiza en la televisión mexicana, verla enamorada y feliz con uno de los tenistas más populares del circuito tiene algo de mágico. Todo empezó hace unas semanas, cuando las redes se llenaron de comentarios tras la aparición de un video en el que la actriz corría a abrazar al búlgaro luego de un partido. Fue un gesto espontáneo, emotivo y muy poco habitual en alguien que suele mantener su vida sentimental alejada del ojo público.

La duda no duró mucho. Durante su paso por el Festival de Cannes, Eiza y Grigor dejaron claro que tienen una relación. Aunque evitaron dar declaraciones, caminaron juntos, se dejaron ver en eventos y, horas después, la actriz publicó una serie de fotos que hablaban por sí solas. El mensaje que acompañó esas imágenes fue todavía más directo: un texto cargado de emoción con el que felicitó a su ahora pareja por su cumpleaños número 33.

En esa publicación, Eiza no se guardó nada. Dijo que él había restaurado partes de ella que ya daba por perdidas y lo llamó su “ser humano favorito”. Agradeció que sus caminos se hayan cruzado y elogió cada parte de la persona que es y en la que se está convirtiendo. Como final, firmó el mensaje con un “te amo, G”, demostrando que no tienen intención de esconder lo que sienten.

Cada vez más personas quieren saber quién es Grigor Dimitrov, y aquí te lo contamos: nacido en Jaskovo, Bulgaria, el 16 de mayo de 1991, es uno de los tenistas más reconocidos del circuito actual. Desde los cinco años empuñó una raqueta y hoy presume títulos como el Masters de Cincinnati y el ATP Finals en 2017. Ha sido semifinalista en Wimbledon, Australia y el US Open, y ha derrotado a leyendas como Federer, Nadal, Djokovic y, recientemente, a Carlos Alcaraz. Fuera de las canchas, le apasionan los autos, la tecnología y los relojes. Su apodo: G-Force.

Jaskovo: La hermosa ciudad búlgara donde nació Grigor Dimitrov

Para los que siguen el tenis, el nombre Grigor Dimitrov seguramente suena familiar. Para otros, más conectados con el cine o las series, probablemente lo hayan escuchado por primera vez ahora que se confirmó su relación con Eiza González. Sea cual sea tu caso, esta es una buena oportunidad para acercarte a Bulgaria, un país que muchas veces pasa desapercibido, pero que merece la atención por su historia, cultura y paisajes. Quién sabe, tal vez hasta encuentres una excusa para planear un viaje.

Bulgaria está en Europa y es parte de la Unión Europea, con Sofía como su capital y el búlgaro como idioma oficial. Aunque tiene unos 6.4 millones de habitantes -menos que Ciudad de México, de donde es Eiza-, la influencia de su cultura va mucho más allá. Con una herencia histórica que abarca tracios, romanos y bizantinos, sus paisajes incluyen desde montañas hasta playas en el Mar Negro. Además, su tradición en perfumería con el famoso aceite de rosa y su yogur natural, reconocido mundialmente, hacen que sea aún más llamativo. 

Jaskovo, la ciudad natal de Dimitrov, tiene más de siete mil años de historia, y sus orígenes se remontan a restos tracios y romanos. Fue fundada como fortaleza en el siglo IX y se fue convirtiendo en un centro comercial, especialmente para la producción de algodón, seda y tabaco. Su clima húmedo subtropical regala inviernos suaves y veranos cálidos, mientras que la vida cultural gira en torno al Teatro Dramático Ivan Dimov, un festival de danza folk y el impresionante monumento a la Virgen María, la estatua más alta del mundo dedicada a ella.

En tu visita conocerás sitios como el parque Kenana, donde además se realiza un festival anual de danza. La iglesia de la Asunción y el monasterio de la Santísima Trinidad son paradas obligadas para entender la fe y tradición de su gente. Si te animas, el Museo Regional te cuenta la historia de la región, y para quienes prefieren la noche, los clubes Barcode y Sense mantienen viva la movida nocturna.