Uno de los mayores espectáculos que puedes disfrutar en el Mar de Cortés es la llegada de las de ballenas grises que realizan una travesía asombrosa desde el Ártico hasta Baja California Sur para alimentarse y tener a sus crías. Aunque la temporada de avistamiento generalmente es de diciembre hasta marzo algunos grupos se quedan hasta abril cuando emprenden el camino de regreso.
En Baja California Sur hay algunos santuarios ubicados dentro de Áreas Naturales Protegidas en los que dan a luz a sus crías dan a luz a sus crías y donde se alimentan y son educadas por las madres para la migración rumbo al norte. La temporada ya comenzó y si quieres admirar a estos gigantes del mar, estos son 3 santuarios imperdibles en Baja California Sur.
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Laguna Ojo de Liebre
Perteneciente a la Reserva de la Biósfera del Vizcaino la Laguna Ojo de Liebre es uno de los santuarios naturales más grandes que cada año recibe a la ballena gris, proveniente de Alaska. Con 60 kilómetros cuadrados, es un complejo lagunar que agrupa cinco zonas núcleo: islas Conchas, Broscas, Piedras, Zacatosa y La Choya. Hay que contratar a un guía, quien te llevara a bordo de una embarcación para verlas. El santuario pertenece al municipio de Mulegé, desde donde se pueden tomar los tours.
Reserva de la Biosfera El Vizcaíno
Es el Área Nacional Protegida más extensa de México y una de las más extensas de América Latina, ocupa 11 por ciento de la superficie total de las Áreas Naturales Protegidas del país. Es considerado el lugar más importante en el mundo para proteger a la población de ballena gris que pasa el invierno en estas aguas cálidas. Para verlas es necesario contratar un guía autorizado por la Semarnat. Este sitio, junto con las pinturas rupestres de la Sierra de San Francisco fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
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Bahía La Magdalena
Las ballenas grises arriban a estas aguas rodeadas por dunas blancas, en diciembre y permanecen ahí hasta finales de marzo, Para verlas es necesario contratar los servicios de un guía autorizado que te llevará hasta el Puerto Adolfo López Mateos donde zarpan las embarcaciones para avistarlas. La mejor hora para verlas es por la mañana, antes del mediodía. Ya que después se sumergen para alimentarse y descansar. En el muelle encontrarás a los guías que te llevarán para verlas, en un recorrido que dura alrededor de una hora. El costo de los tours ronda los 3 mil 500 pesos.