Xochimilco es considerado como uno de los sitios más visitados por las y los turistas que visitan la Ciudad de México. A tal grado de ubicarse como uno de los atractivos turísticos más importes ubicados en la CDMX, entre los que destacan también Basílica de Guadalupe, el Ángel de la Independencia, el Zócalo capitalino, entre otros increíbles lugares que son visitados por millones de visitantes tanto locales como extranjeros.
Pero, ¿sabías que esté maravilloso lugar oculta una zona arqueológica? Sí, además de sus hermosos canales llenos de chinampas, increíble flora y fauna de la que destacan sauces, eucaliptos, lirios, así como ser hogar del ajolote, liebres, conejos, zorrillos, entre otros, existe una zona con vestigios arqueológicos que podrías conocer en tu próxima visita a Xochimilco. Puede ser una muy buena opción después de tu viaje en trajinera.
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¿Hay una zona arqueológica oculta en Xochimilco? Conoce el Cerro de Cuahilama
Dicha zona arqueológica se ubica en el Cerro de Cuahilama, y se tratan de grabados que fueron encontrados por parte del Proyecto de Salvamento Arqueológico Cuahilama-Piedra Larga, quienes se dedicaron a realizar recorridos sobre la superficie, así como levantamientos topográficos y fotografías aéreas para poder constatar de que se trata del patrimonio arqueológico de esta zona de la ciudad.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), en este en el Cerro de Cuahilama -cerro de la anciana, en náhuatl- fueron descubiertas áreas habitacionales en Piedra Larga, así como 16 monumentos prehispánicos que fueron labrados en las laderas en este cerro. Asimismo, se cree que esta zona descubierta apenas es la “punta del iceberg” de lo que podría ser un área con mayor potencial arqueológico mayor.
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Esta zona arqueológica cuenta con una longitud de 3 kilómetros por 1.5 de ancho. Y abarca pueblos de Santa Cruz Acalpixca y San Gregorio Atlapulco hasta llegar San Bartolomé Xicomulco, para ser más exactos llegando a los límites de la de la alcaldía de Milpa Alta.
En cuanto a los vestigios que se encontraron, los expertos opinan que se trata de objetos que datan del periodo Posclásico Tardío (entre 1420 y hasta la época del contacto con los españoles). Época en la que el imperio mexica hizo de esta zona un enclave importante para dirigir sus campañas militares hacia la llamada Tierra Caliente de Morelos, Guerrero y Puebla, que iniciaron con el gobierno de Itzcóatl, en 1428.
Además, se pueden apreciar representaciones labradas en los relieves de las piedras figuras como el glifo del Nahui Ollin (que alude al nacimiento del Quinto Sol y los rumbos cardinales), el bastón de mando de Quetzalcóatl, y el Ce Cipactli. También está labradaun xoloitzcuintle, una mariposa o papalotl junto con la planta sagrada de los xochimilcas, el huacalxochitl.