Aventuras hay muchas, pero pocos toleran la adrenalina y la sensación de miedo que pueden provocar ciertas actividades, por lo que visitar un pueblo fantasma no es para todos, ya que tus emociones se magnifican y te llevan al límite, aunque puede ser la opción para una escapada de fin de semana y, sobre todo, si buscas algo diferente.
A lo largo de todo el país hay varios sitios que guardan misterios increíbles y que las leyendas e historias van mucho más allá de la ficción, ya que hay testigos que aseguran que vivieron experiencias fuera de lo normal y es por eso que estos lugares cobraron su fama, misma que sigue hasta la actualidad.Si de pueblos fantasma se trata, en todo México hay muchos, pero aquí te dejamos cinco opciones que te pondrán los pelos de punta.
Te podría interesar
Pueblos Fantasmas para visitar en México
Real de Catorce
Ubicado en San Luis Potosí, este lugar está a solo dos horas de la capital del estado y tiene sitios emblemáticos como el Túnel Ogarrio construido en 1639 y fue uno de los centros mineros más importantes en la explotación de la plata. Este lugar es sagrado para todos los huicholes de la zona debido a que está enclavado en el desierto de Wirikuta. La cultura, que lleva el mismo nombre que el desierto, es ampliamente respetada y se cree que han pasado por muchos fenómenos paranormales que se reflejan en el municipio.
Te podría interesar
Mineral de Pozos
Un sitio maldito, de acuerdo con los lugareños y los que lo visitan. Ubicado en Guanajuato, la leyenda cuenta que durante la Guerra Cristera el sacerdote del pueblo murió asesinado y eso llevó a la maldición del municipio, ya que echó una maldición sobre todos los habitantes. Sin embargo, otros cuentan que está lleno de fantasmas porque en 1938 se dio una inundación que dejó las minas bajo el agua y acabó con cientos de vidas.
San Juan Parangaricutiro
Ubicado en Michoacán, este sitio se volvió fantasma luego de la erupción del volcán Paricutín en 1943 y por el cual todo el pueblo se llenó de lava y acabó con todo a su paso, mientras que solo dejó la iglesia del municipio.
Ojuela
Este sitio en Durango se descubrió en 1598 por los españoles, quienes encontraron una mina de plata de grandes magnitudes y que en el siglo XX se perdió por las inundaciones, lo que terminó con el pueblo en aquel momento. Para llegar hay que cruzar un puente colgante, mismo que se inspiró en el Golden Gate de San Francisco.
Misnébalam
Ubicado en Yucatán, el lugar quedó vacío en 2005 por diversas índoles, pero la realidad es que cuentan que se aparece el fantasma de Juliancito, un niño de 9 años que se colgó de un árbol, y quien pasea por el pueblo, mientras que otros aseguran que vieron a un monje con túnica negra aparece por las noches en la iglesia del pueblo.