Uno de los territorios sobresalientes de México es Hidalgo, donde no solo sus hermosos Pueblos Mágicos te brindan la oportunidad de admirar sus paisajes boscosos y su historia minera, también tienes la oportunidad de relajarte en sus hermosas aguas termales. Prueba de ello es el balneario termal de Tzindejéh, donde las doncellas y princesas otomíes llegaban a este lugar para disfrutar de sus propiedades curativas.
De acuerdo con la historia del Balneario Tzindejéh, desde finales del siglo XIX, se descubrió el primer manantial que da vida a este lugar; una vez que se descubrió se dice que durante su época de gran esplendor aquí acudieron princesa y doncellas otomíes y tarascas, donde las aguas hacían rejuvenecerlas y curar enfermedades, así como contar con un mágico afrodisíaco. Esta leyenda prevalece y una vez que el balneario abrió sus puertas un 19 de mayo de 1959, se incorporaron hermosas esculturas recordando un poco esta historia.
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¿Cómo llegar al balneario Tzindejéh en Hidalgo?
Aprovecha los beneficios y propiedades de las aguas termales que ayudan a mejorar la presión sanguínea, mejoran la piel, relajan los músculos, etc. Desde hace 65 años este lugar se ha consolidado en Hidalgo, así que ofrecen espacios cómodos para acudir en familia, con amigos o en pareja.
Si viajas desde la Ciudad de México al balneario Tzindejéh puedes tomar dos casetas de cobro, una en la caseta de Tepotzotlán, otra en Ecatepec. La primera te hará pasar por Coyotepec, Jorobas, Tula, Tepetitlán, Chapantongo para después llegar al poblado de Alfajayucan y seguir el camino a Tasquillo, donde se encuentra el balneario.
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La segunda ruta es por la caseta de Ecatepec, la cual te llevará directo a Pachuca, después deberás seguir por la carretera hacia Actopan, Ixmiquilpan y seguir la ruta a Tasquillo. Cada ruta depende de la salida que decidas tomar desde la CDMX, si requieres de mayor información puedes visitar su página oficial.