Un espectacular lienzo blanco te espera en este enigmático destino mexicano que guarda uno de los secretos mejor conservados sobre la belleza de este lugar que sorprende a los aventureros que buscan vivir una experiencia fuera de lo común en el norte de México, a la vez de aprender de una de las actividades económicas más importantes y rentables del país
Este impresionante lugar es tan inmenso que se recomienda ir en una visita con un guía debido a que es muy fácil perderse entre un paisaje en donde predomina el blanco y pueden distinguirse algunos tonos rosas y grises debido a los procesos que se llevan a cabo en este lugar para extraer la sal del agua marina que se bombea desde el océano Pacífico.
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Guerrero Negro, la salinera más grande del mundo
Esta salinera es el epicentro de un espectáculo blanco increíble, que en temporada invernal puede confundirse con un paisaje nevado, sin embargo, se trata de la sal obtenida después de un proceso de evaporación del agua salada extraída de los océanos pertenecientes a México y que le regalan a los visitantes una increíble vista en dunas interminables de sal.
Como te lo comentamos, esta salinera está ubicada en Guerrero Negro en Baja California Sur, para que te des una idea de la inmensidad y belleza de este sitio, este el destino cuenta con 33,000 hectáreas de terreno que lo convierten en la salinera más grande del mundo. Que sea que pertenece a una paraestatal y a una empresa privada, existe una zona destinada para el turismo.
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¿Qué se puede hacer en la salinera más grande del mundo?
Hasta este lugar llegan incansables turistas amantes de escenarios increíbles, qué gustan de realizar senderismo y turismo de aventura pues se pueden recorrer varios kilómetros sobre increíbles dunas de sal, y es que esta planta en un año ha llegado a procesar alrededor de 8 millones de toneladas métricas de sal, una producción increíble a nivel internacional.
Otro de los increíbles atractivos de este lugar son los Darts, qué son los transportes producidos específicamente para recolectar la sal y llevarla al lugar donde se limpia de todas las imperfecciones, estos vehículos son tan grandes que una sola llanta alcanza el diámetro de 3 m necesarios para soportar los 260 toneladas, capacidad que tienen estos vehículos.
Por si toda esta belleza fuera poco es necesario mencionar que durante alguna caminata en estas instalaciones es común encontrar pequeñas lagunas de agua oceánica que son el reflejo de que aún no ha terminado el proceso de desecación, lo que convierte a este desierto salino en un un espectáculo blanco con lagunas de aguas turquesa ideales para disfrutar en familia y tomarse algunas de las mejores fotos para redes sociales.