El 26 de julio comienzan los Juegos Olímpicos París 2024, y la ciudad ya está engalanándose para este importante evento multideportivo a nivel mundial. Uno de los mayores símbolos de la ciudad, la icónica "dama de Hierro", es decir, la Torre Eiffel, tendrá un papel fundamental en la bienvenida a todos los que viajarán a la ciudad para los días de los Juegos Olímpicos. Los emblemáticos aros olímpicos, los cinco anillos entrelazados, ya han sido instalados en la Torre Eiffel.
Los aros de acero reciclado, que en este caso son aros iluminados por luz LED de colores, fueron instalados en el primer y segundo nivel de la torre. La imponente escala de estos aros es de nada más y nada menos que 29 metros de largo por 13 de alto. Cada uno de ellos, con sus distintivos colores azul, amarillo, negro, verde y rojo, es la representación más reconocible de los Juegos Olímpicos, mientras que la Torre Eiffel lo es de París. La unión de estas dos imágenes emblemáticas representa perfectamente esta edición de 2024.
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El turismo en París 2024
Además de la icónica Torre Eiffel, símbolo de la capital francesa, hay otros destinos turísticos que formarán parte del desarrollo de esta edición de los Juegos Olímpicos, como el Palacio de Versalles, el Grand Palais y la Plaza de la Concordia, entre otros. Los preparativos para este evento son tan extensos que, desde su inicio, han generado quejas por parte de los turistas.
A través principalmente de las redes sociales, varios visitantes que han viajado a la "ciudad del amor" han expresado su descontento debido a que varios lugares están cercados para su preparación para la contienda deportiva. Un ejemplo es la Torre Eiffel, que se encuentra vallada, impidiendo así su vista; lo mismo ocurre con otros destinos turísticos a los que no se puede acceder de forma normal.
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La Torre Eiffel, un símbolo de París
La Torre Eiffel, inaugurada en 1889, se alza con una altura de 324 metros si se considera su antena. Fue construida como parte de la conmemoración del centenario de la Revolución Francesa. Según datos oficiales, la torre consta de 18.000 piezas de hierro forjado y 2,5 millones de remaches.
Su construcción representó en su época y continúa representando un hito en la arquitectura y la ingeniería. Por ello, resulta poco común que se modifique o se le añadan elementos, a excepción de la pintura, que se renueva cada 7 años para prevenir la erosión. La instalación de esta estructura de aros para los Juegos Olímpicos es un caso excepcional, en consonancia con la excepcionalidad del propio evento.