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Este paraíso turístico fue inundado intencionalmente y esconde uno de los misterios más fascinantes

Rodeado de montañas y con un enorme monolito entre sus calles, este pueblo es uno de los destinos más surrealistas del continente

Guatapé y El Peñol.Destinos en ColombiaCréditos: Unsplash/ Jossie Díaz
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Uno de los destinos más impresionantes de Colombia también posee una de las historias más intrigantes: hablamos de Guatapé. Este lugar es famoso por sus casas coloridas y sus zócalos en relieve, que narran la historia del pueblo, haciendo de cada rincón un testimonio de arte e historia. Además, en Guatapé se encuentra la Piedra del Peñol, un monolito de 220 metros de altura hecho de granito, al que se accede por un sendero con 708 escalones.

Desde la cima de la Piedra del Peñol, puedes disfrutar de vistas impresionantes de los municipios de El Peñol y Guatapé, así como del embalse, que crea uno de los paisajes más espectaculares de la región. Este embalse es una obra humana, pues para su construcción, los pueblos que antes ocupaban el área fueron inundados y luego reubicados, lo que genera un enigma fascinante que se suma a la belleza del lugar.

El pueblo entre montañas y aguas cristalinas para conocer un monolito 

Guatapé es un bellísimo pueblo lleno de color, rodeado de montañas y aguas cristalinas. Sus casas llenas de color y arte,  y el imponente monolito que se alza en el paisaje lo hacen un destino incomparable que parece sacado de un cuento. Ubicado en el departamento de Antioquia, a solo dos horas de Medellín, Guatapé es una visita obligada.

Al llegar, te sorprenderán las imponentes vías que se elevan sobre el agua, preparándote para el encuentro con el coloso de piedra. Al doblar una curva, la inmensa mole del monolito se revelará ante ti, invitándote a ascender por sus escalinatas que se integran perfectamente con la enorme roca. Si no te gustan las escaleras hay tour en helicóptero

Guatapé, el pueblo que resguarda un monolito de más de 200 metros. Créditos: Pexels/ Diego Gonzalez

Además de la visita a la Piedra del Peñol, el propio pueblo es un paraíso de colores y tradición. Cada casa, restaurante, museo y cafetería está decorado con una explosión de colores y detalles. El pueblo es especialmente conocido por sus zócalos, que son la parte inferior de las fachadas de las casas. En Guatapé, estos zócalos están adornados con pinturas y relieves que narran la historia de las familias que habitan las casas, eventos locales y escenas del lugar. Ignacio Suárez, conocido como "Zocalero", es uno de los artistas más aclamados del pueblo, con más de 5,000 obras a su nombre.

Y si todo lo anterior no fuera suficiente, puedes explorar el área en lancha o pasear por los muelles a pie, disfrutando de los imagnéticos paisajes donde el verde de las montañas contrasta con el azul profundo de la presa. Para un recorrido completo por el pueblo, la mejor opción es un tour en tuk-tuk. Estos vehículos motorizados de tres ruedas, conocidos por su colorida decoración, te llevarán a los puntos más importantes del pueblo con la guía de un experto.