PRIMAVERA 2024

Equinoccio 2024: ¿Cómo llegar a Chichén Itzá desde Cancún para ver el descenso de Kukulkán?

En el inicio de la primavera, se da este espectáculo natural donde se aprecia la sombra de la serpiente bajando por la pirámide

Chichén Itzá.Importante zona arqueológica de la cultura mayaCréditos: Pixabay/jonny_joka
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Si estás pasando esta temporada por la Península de Yucatán y disfrutando del Caribe mexicano, uno de los mejores lugares para recibir el Equinoccio de Primavera es la zona arqueológica de Chichén Itzá pues si no has tenido oportunidad de admirar el descenso del Kukulkán en las escalinatas de la pirámide conocida como El Castillo, te asombrará tal efecto de sombras.

Entre Cancún y Chichén Itzá hay 196 kilómetros, por la Carretera Federal 180D; ya sea que hayas llegado al Aeropuerto Internacional de Cancún, así puedes contratar servicios turísticos que hacen tours hacia la importante zona arqueológica maya de Chichén Itzá, o bien, rentar un vehículo e ir a tu tiempo.

¿Cómo llegar a Chichén Itzá desde Cancún en autobús?

La otra alternativa y que sin duda es la más económica para trasladarte desde Cancún a la zona de Chichén Itzá es abordar un autobús desde la terminal del ADO que está en el centro de Cancún y el tiempo de traslado es de aproximadamente tres horas y media; asegúrate de verificar -y confirmar- los horarios de las corridas para que no pierdas el autobús de regreso.

Los adultos mayores entran gratis/Foto:Pixabay/maximito31

¿Cuánto gastas en caseta si viajas en auto de Cancún a Chichén Itzá?

Si optas por viajar en auto desde Cancún para admirar el descenso de Kukulkán esta próxima primavera, en la aplicación Traza Tu Ruta de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes del Gobierno de México, indica que el costo de casetas por trayecto es de 479 pesos, pasando por dos plazas de cobro:

  • Xcan 385 pesos
  • Pisté 94 pesos

¿A qué se debe el descenso de Kukulkán?

Este fenómeno de luz y sombra que solo se percibe en los equinoccios de primavera y otoño en la zona arqueológica de Chichén Itzá fue documentado en 1969 por el académico Jean Jacques Rivard, y se aprecia una serpiente descendiendo por la escalinata de la pirámide conocida como El Castillo, que posiblemente para los mayas fue esa unión de lo terrenal con lo sagrado, dejando testimonio de su conocimiento de astronomía y por supuesto, del calendario solar.